Conífera perenne de crecimiento bajo y extendido, con follaje dorado que se mantiene brillante durante todo el año. Es ideal para borduras, jardines rocosos o como planta ornamental en jardines soleados. Prefiere suelos bien drenados y es muy resistente a la sequía, lo que la convierte en una excelente opción para jardines de bajo mantenimiento. Su color dorado añade un contraste cálido y atractivo a los paisajes, y su crecimiento extendido la hace perfecta para cubrir grandes áreas sin necesidad de un mantenimiento intensivo.